viernes, 17 de septiembre de 2010

Algo más que pizza: qué comer en Sicilia

Por María Luisa Regalado

A través del tiempo, Sicilia, debido a su enclave especial en medio del Mediterráneo, ha recibido influencias muy variadas: griegas, fenicias, romanas, árabes, normandas, españolas,... Estas aportaciones no sólo forman parte ya de su patrimonio arquitectónico, sino que, fusionándose con los productos locales, han dado lugar a una gastronomía atractiva, variada e incluso sorprendente.

La pasta
Uno de los pilares de la cocina siciliana -como no podía ser menos, tratándose de una región de Italia- son los contundentes platos de pasta locales, que pueden ir acompañados de carne, de verduras (con gran frecuencia berenjenas) o de pescado. Entre estas últimas composiciones destaca la pasta con sardinas -pasta con le sarde-, muy típica de la provincia de Trápani, y uno de los platos más famosos de Sicilia. La sabia combinación del pescado con ingredientes como pasas y piñones le han dado a esta receta su merecido prestigio.

Arancini
Una vez hemos presentado homenaje a la omnipresente pasta, podemos detenernos en otras especialidades sicilianas. Las arancini son unas curiosas bolas de arroz del tamaño de una naranja, rebozadas y rellenas de ragú de carne. Aunque a primera vista su tamaño puede resultar pantagruélico, suelen estar bien confeccionadas y el resultado, en términos de sabor, está muy bien conseguido.